Apreciación película “Los colores de la montaña”
Los colores de las montañas son un retrato contemporáneo de la vida cotidiana en un pueblo en algún lugar del campo colombiano. Este novedoso largometraje está narrado desde la perspectiva de los niños que son los protagonistas de la historia.
La mirada poética e inocente del menor contrasta con el comportamiento irracional ya veces cruel del mayor, no exento de ironía. La historia de la película se centra en la amistad entre el niño protagonista Manuel y su mejor amigo y compañero de clase Julián.
Un día perdieron la pelota mientras jugaban un partido de fútbol y terminaron en un campo minado. Junto a Poca Luz, harán todo lo que esté a su alcance para salvar este preciado objeto que es vital para sus sueños y la vida cotidiana. Asimismo, paulatinamente se impondrán duras realidades en su juego.
Apreciación
Revisando esta película, primero desde el punto de vista técnico, nos damos cuenta que está hecha de manera muy sencilla, en cuanto al manejo de cámaras se refiere; deja ver ese sello impregnado en la mayoría de las películas de cine independiente, así mismo los planos que utiliza son llamativos y muestra en muchos de ellos la amplitud y grandeza de los paisajes, también la administración del sonido me parece muy buena y noté algo que me llamó la atención y es que esta película, a diferencia de otras, no utiliza mucha música como ayuda a esos momentos que se tornan más emotivos, si lo hace, pero de manera muy reducida, y de esta forma nos podemos dar cuenta que es un buen trabajo, ya que transmite al espectador el mensaje y lo hace con poca ayuda de sonido.
En cuanto a la historia que presenta la película me parece un excelente trabajo, la verdad a medida que pasa el tiempo nos vamos dando cuenta que en realidad si se pueden hacer cosas nuevas y que el cine comercial no lo es todo, ya que siempre existen historias como esta que todavía no se han contado a través de este arte. La película nos muestra en su historia como sufre una familia que es desplazada por la violencia, es algo que en el cine colombiano no habíamos visto, pero es más especial aun, que lo cuentan desde el punto de vista de los niños, es decir, nos presentan una historia, pero al mismo tiempo mostrándonos que los actores principales son los niños, en la forma como ellos están viviendo esa situación, yo sé que a más de uno lo deja con la boca abierta y a veces no podemos creer que exista tanta inocencia en un niño, por citar ejemplo cuando se llevan al papá de Manuel, queda el balde de la leche en el suelo derramado, este jamás imagina que a lo mejor secuestraron a su papá, sino que por el contrario culpa al ternero de este suceso.
Además de ese, se utilizan muchos símbolos e indicios en la película a través de los cuáles el director se basa para contar la historia sin la necesidad de mostrar sangre o disparos de frente como lo hacen muchas películas, esta muestra la situación pero a través de acontecimientos que le van diciendo al espectador lo que va ocurriendo y en su mayoría lo hace desde el drama de la separación de la amistad de los niños, en otro caso muchos de ellos tienen que abandonar la escuela, luego finalmente es la profesora quien tiene que dejarla; y así como estas, existen otras situaciones a lo largo de la película que nos muestra el drama, sin necesidad de utilizar expresiones explícitas de guerra, las cuales ya estamos acostumbrados a ver, acá se puede apreciar la intelectualidad con la cual el director quiere trabajar para presentar su historia y con la intención que sea vista de esa manera.
Desde la parte protagónica, nos muestran la amistad de unos niños, los cuáles como muchos en su infancia, son cómplices de juegos, travesuras y muchos más; es de esas amistades que parecen interminables, pero da lástima ver como se tienen que separar por culpa del conflicto y la implicación que tienen sus padres dentro de este, así mismo presenta la inocencia de cada uno de los protagonistas, Manuel, Julián, Poca luz, quienes ven pasar el problema ante sus ojos siempre descuidando lo malo que les pueda pasar sino manteniendo los intereses de niños, los cuales son los que están viviendo, como lo es en el caso de Julián unos guayos que le quedan grandes, o en el caso de Manuel el balón que se le va al campo minado, entre otros.
La situación que refleja la película no es más que un acontecimiento que tienen que vivir muchas familias en Colombia por culpa del conflicto armado y mucho más personas que les toca hacer parte dentro de este; y es duro mirar como unos niños con una mentalidad tan inocente, y que como todos los niños de su edad se preocupan por jugar, estos a diferencia tienen que soportar las inclemencias y especialmente el desplazamiento causado por la violencia, al punto de que hasta llegan a quedar sin padre, y a Manuel le toca irse solo con su madre fuera del pueblo.
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